Hace poco escuché en una emisora de radio que en ocasiones las personas estamos sobre alimentados y mal nutridos. Esa frase hizo eco en mis pensamientos. Vivimos consumiendo distintas cosas sin pensar en nuestro cuerpo y las consecuencias que tendremos a largo plazo.
Nuestro bienestar dependerá de las decisiones que tomemos y esto será revelado en su momento. La nutrición del cuerpo no se limita a los alimentos que consumimos sino también a todo aquello que ingerimos para desarrollar nuestra mente y nuestro espíritu.
Pudieras pensar que el secreto de la salud está en los alimentos y, sin embargo, a veces tener control sobre tu mente sería la base para tomar las decisiones correctas sobre lo que vas a ingerir. Al final, es como todo, el secreto está en el balance. Somos cuerpo, mente y espíritu; y cada parte es importante. Una no va por encima de la otra.
Imagínate una rueda, ¿puede rodar con un tornillo que está sacándole el aire? Quizá por un tiempo, hasta que se hace imposible manejar el desbalance por la falta de aire. Igual, sucede con cada área de nuestra vida. Hay que mantenerlos y suplir las necesidades que cada área tiene, considerando como podemos fortalecerlas para que podamos atender los distintos roles que desempeñamos y las responsabilidades que tenemos.
Si el centro que eres tú, no está bien, entonces los roles que desempeñas pudieran verse afectados y a su vez te veras impactado en las relaciones que estableces: Familia, Trabajo, Comunidad, entre otras tantas. Así que la clave es nutrir tu cuerpo con alimentos que suplan tus necesidades nutricionales más alla de tus gustos previamente aprendidos. Nutrir la mente con la lectura, estudios y temas que te ayuden a desarrollar otras perspectivas o conocimientos. Nutrir tu espíritu con meditaciones, oraciones y/o aquello que te permita atender esa parte de ti.
La nutrición es un acto de amor para contigo y con las personas que te aman. Y como todo en la vida, requiere disciplina, tiempo y dedicación, sin embargo, será la mejor inversión que harás en ti y por ti.